Un nuevo juego, un nuevo análisis. En este caso, estamos con Trine Enchanted Edition, la versión remasterizada lanzada en 2009 para ordenador, mejorando el juego original desarrollado por Frozenbyte. Esta entrega es un juego de plataformas y puzles en el que nos embarcamos en una aventura junto a tres personajes, quienes permanecen juntos en todo momento, pero cada uno con habilidades únicas.
Después de este breve resumen, vamos a analizar cada uno de los apartados que ofrece este videojuego.
Una historia de cuento de fantasía, aunque sin demasiada profundidad
Empezando, como siempre, por la historia, nos encontramos ante una trama de puro cuento de fantasía. Todo ocurre en un lugar encantado que se encuentra en decadencia debido a unas fuerzas oscuras. Los tres protagonistas, que no pueden separarse debido a un objeto místico, intentarán restaurar la paz en el reino.
La verdad es que, tras este breve resumen de la trama, no podemos esperar algo increíblemente profundo, como podría ser el caso en otros tipos de videojuegos o géneros. Siendo realistas, y tras haber probado varios juegos de plataformas, especialmente en 2D, son pocos los que cuentan una historia que realmente nos sorprenda.
Entre los puntos negativos de la historia, uno de los más evidentes es que el inicio se siente un poco forzado. Los personajes caen bajo el poder del objeto místico, llamado Trine, de una manera que resulta, a nuestro parecer, algo absurda o descuidada. Esta conveniencia narrativa sirve para justificar que los tres protagonistas permanezcan juntos durante toda la aventura. Además, el juego no profundiza ni explica demasiado algunos elementos importantes, como los villanos o los habitantes del reino, quienes ni siquiera aparecen. Otro aspecto que podría haberse trabajado más es el desarrollo de los tres personajes principales. Aunque sea un juego de plataformas 2D, dado que se trata de un cuento de fantasía, no habría estado de más conocer más sobre ellos y sus historias.
Aún así, la implementación de un narrador que nos va contando el viaje de nuestros aventureros y lo que le va ocurriendo al reino, aunque no sea de manera muy extensa, nos parece una decisión más que acertada para este videojuego, ya que literalmente es como escuchar un típico audiolibro de fantasía. Además, aunque no ocurre en todo momento, nuestros protagonistas también nos proporcionarán información relevante, ya sea relacionada con ellos mismos, el Trine u otros elementos de la historia.
Una jugabilidad que destaca por su modo cooperativo
Sinceramente, creemos que, independientemente de por cuál Trine decidas empezar, es casi un pecado no jugarlo en modo cooperativo, ya sea en línea o en local. Aunque puedes jugarlo por tu cuenta, tanto la trama como los niveles están diseñados para que utilices a cada uno de los personajes. Si bien es posible jugar en solitario, la verdadera magia de este juego radica en que un jugador apoye al otro, e incluso puedas aprovechar las mecánicas que ofrece para superarlo de diferentes maneras, o hacerlo más fácil.
Quizás pienses, si nunca has jugado a un Trine, que se trata del típico juego de plataformas donde los personajes obtienen habilidades al estilo Mario Bros., o que no aprenden nada nuevo. Pero nada más lejos de la realidad. El videojuego cuenta con un sistema de habilidades individuales para cada personaje, además de un inventario en el que podrás equiparlos con objetos encontrados en cofres repartidos a lo largo de varios niveles. Todo esto mejora aún más las capacidades de los personajes durante la aventura. Ligado a esto, los niveles, aunque lineales, invitan bastante a explorar para encontrar pociones de experiencia, de maná y los cofres mencionados anteriormente. Habrá momentos en los que deberás poner a prueba tu ingenio, o el de tu compañero, para descubrir cómo llegar hasta ellos. Es en esos momentos donde realmente podrás comprobar si has aprendido a usar las habilidades de los personajes, no solo para resolver acertijos, sino también para avanzar en los niveles, como usar el arco de la ladrona para encender antorchas y revelar más partes del escenario.
Sin duda, la jugabilidad está muy bien lograda para ser una remasterización de 2009, aunque no es del todo perfecta. Te encontrarás con algunos bugs, como el del escudo del guerrero, donde en lugar de apoyarte en él, lo atraviesas, lo que dificulta usar esa mecánica para llegar a sitios más altos. Además, la cámara del juego puede ser un problema, especialmente en modo cooperativo. Si decides jugar solo, quizás no lo notes tanto, pero en cooperativo, si un jugador va a la derecha y el otro a la izquierda, la cámara siempre seguirá a un solo jugador, e incluso puede perderse y no saber a quién enfocar, lo que rompe la experiencia del juego.
Técnicamente superior a su versión original, aunque no perfecta
Al tratarse de una versión actualizada del juego original, como era de esperar, nos encontraremos con varias mejoras técnicas. Ahora utiliza el motor gráfico que más adelante se emplearía en la segunda entrega, lo que mejora la estabilidad y el rendimiento en comparación con la versión original, que presentaba numerosos bugs y problemas de rendimiento. Este motor saca provecho del sistema de físicas Havok, ampliamente utilizado por muchas compañías importantes en sus sagas principales. Una de las principales características de este engine es el sistema de colisiones, que permite romper modelos en varios trozos, algo que se aprecia en varias ocasiones a lo largo del juego. Los gráficos, para su época, nos han sorprendido gratamente, sobre todo en la versión para PC, donde se implementan tecnologías que incluso consolas como la Nintendo Switch, en muchos casos, aún no pueden aprovechar, como el antialiasing para suavizar los bordes de los modelos en 3D. Además, cuenta con un sistema de iluminación que encaja a la perfección con el juego, especialmente con las mecánicas de las antorchas ya mencionadas.
Aun así, aunque el equipo intentó ofrecer un producto de buena calidad, al no ser una empresa de gran envergadura en comparación con otras más importantes, se pueden encontrar algunos problemas en este apartado. Por ejemplo, hay momentos en los que las físicas del juego no están del todo pulidas, y algunos elementos del mapa se comportan de manera extraña. En más de una ocasión, el sistema de interacción/colisión es algo impreciso, especialmente con las palancas: si te mueves ligeramente, puede que el juego no detecte que el personaje está en la posición correcta para activarlas. Además, en ciertos puntos puedes quedar atascado sin poder moverte o con movimientos limitados, especialmente si te encuentras debajo de una plataforma o elemento del escenario.
Un apartado artístico que refleja perfectamente el estilo de cuento de hadas
Aquí es donde Trine realmente brilla. Los escenarios muestran un cuidado minucioso en cada detalle, recreando paisajes de fantasía que logran una atmósfera de cuento de hadas con gran acierto. El uso del color es clave, con cada nivel bañado en una paleta vibrante y contrastante que contribuye a crear una ambientación mágica. Desde los verdes brillantes y luminosos de los bosques hasta los tonos más oscuros y misteriosos de las mazmorras o cementerios, los escenarios mantienen un equilibrio visual que capta la atención del jugador. A pesar de su linealidad, los entornos se sienten muy vivos, con fondos y elementos llenos de movimiento, lo que aporta un encanto visual innegable.
Todo este conjunto logra que el juego posea una fuerte cohesión artística. Nada parece fuera de lugar o ajeno al universo de Trine, lo que permite una experiencia más inmersiva. Desde los fondos hasta los personajes y objetos interactivos, todo está diseñado para ajustarse a ese estilo de cuento de hadas.
La transición a la Enchanted Edition permitió al equipo de desarrollo pulir y revitalizar esta estética, mejorando significativamente en comparación con la versión original. Aunque no hayas jugado a la versión anterior, basta con ver las imágenes para quedar fascinado por el excelente trabajo realizado.
Sin embargo, este apartado no es perfecto. Aunque los personajes están bien diseñados, no destacan tanto como los escenarios. La caracterización de los protagonistas resulta algo genérica, recurriendo a arquetipos ya vistos en muchos otros medios, tanto digitales como escritos. Además, salvo los jefes (que también tienden a repetirse), los demás enemigos son esqueletos sin mucha variedad, lo que resalta la falta de diversidad de adversarios, algo que sí encontramos en otros títulos del mismo género
Un apartado sonoro que transmite la sensación de un mundo mágico bastante bien
La banda sonora de Trine es evocadora y hermosa, compuesta por Ari Pulkkinen, quien antes de trabajar en la saga Trine comenzó componiendo para el videojuego Starfight VI: Gatekeepers. Cada pista creada por él complementa perfectamente los escenarios en los que te encuentras, desde bosques encantados hasta mazmorras sombrías, creando una atmósfera atrapante. La música varía entre temas tranquilos y orquestales, hasta melodías más tensas en momentos de combate o peligro.
En cuanto a los efectos de sonido, aunque son efectivos, no destacan demasiado. El sonido de las espadas, las flechas y los hechizos cumple su función sin sobresalir, y las voces de los personajes añaden un toque simpático. Afortunadamente, estas voces no están presentes en todo momento, lo que preferimos a que hablen constantemente en medio de un combate, ya que la concentración impide escuchar con atención lo que dicen. Aunque no es un apartado sorprendente, cumple con su cometido.
Quizás el aspecto menos detallado del videojuego sea precisamente el que vamos a comentar ahora: durante las cinemáticas, donde el narrador nos cuenta más sobre la historia, aunque la música acompaña bien, notamos una cierta carencia de efectos de sonido. Se echan en falta detalles, como sonidos atmosféricos que nos hagan sentir más inmersos en el entorno, aunque no lo estemos viendo en pantalla.
¿Existe innovación en Trine Enchanted Edition?
En términos de innovación, tanto el Trine original como la Enchanted Edition no revolucionan demasiado las mecánicas dentro del género de plataformas. Sin embargo, la versión remasterizada introdujo el modo multijugador online para disfrutar del cooperativo, aunque un año antes, otro juego del mismo género, LittleBigPlanet para la consola PS3, ya había implementado ese sistema aunque no fuera del todo perfecto. A pesar de no ser pionero, Trine destaca por la forma en que combina plataformas, acertijos basados en física y un enfoque cooperativo, algo mucho menos común en la época de su lanzamiento original en 2009.
La posibilidad de alternar entre personajes para resolver acertijos añade un nivel de profundidad a la experiencia del jugador, especialmente porque no existe una única solución correcta para los desafíos, lo que incentiva la experimentación. Y, como tal, pese a no innovar en su combinación de mecánicas, lo convierte en un juego único y atractivo.
¿Cual es la duración de Trine Enchanted Edition?
El juego no es largo, como era de esperar en un título de plataformas; su duración oscila entre 7 y 10 horas, dependiendo de cuánto tardes en resolver los acertijos o si juegas en solitario o en cooperativo. Si decides jugar por tu cuenta, es probable que el juego se te haga más largo por el simple hecho de que necesitarás dominar a cada personaje. Esto, de forma individual, dificulta la resolución de ciertos acertijos y combates, por lo que deberás tomarte tu tiempo, especialmente si quieres obtener todas las recompensas, algunas de las cuales no son fáciles de conseguir.
En cuanto al modo cooperativo, si lo juegas con 3 personas, es como jugar en modo fácil sin activarlo. Cada jugador, al controlar un personaje, puede encargarse de una tarea diferente: uno puede ser el apoyo con el mago para avanzar más rápido o ayudar a conseguir los objetos, mientras que los otros dos se enfocan en derrotar enemigos y llegar a lugares más rápido. Aunque los roles también pueden invertirse en algunos casos. Esto hace que el juego dure aproximadamente entre 5 y 6 horas, o incluso menos, que es la duración exacta de la historia.
Conclusión:
Trine: Enchanted Edition es un juego muy bonito y divertido que destaca especialmente por su apartado artístico y su jugabilidad cooperativa. Aunque no ofrece una historia compleja ni mecánicas innovadoras en el sentido tradicional, su presentación visual y su capacidad para combinar de forma más que adecuada diferentes estilos de juego lo convierten en una experiencia memorable. Su duración puede ser corta, pero es ideal para disfrutar en sesiones breves o para compartir con amigos en modo cooperativo.